¡La UE lanza su nuevo Sistema de Entrada y Salida!

En el mundo de los viajes internacionales, los sistemas de control fronterizo están en constante evolución. La Unión Europea ha anunciado oficialmente el lanzamiento de su nuevo Sistema de Entrada y Salida (EES). Este sistema comenzará a operar el 12 de octubre de 2025 y traerá cambios importantes en la forma en que los visitantes de países no pertenecientes a la UE experimentan los controles fronterizos.

¿Qué es el Sistema de Entrada y Salida (EES)?

El Sistema Europeo de Entrada y Salida, o EES por sus siglas en inglés, es un sistema automatizado basado en datos biométricos diseñado para registrar y supervisar las entradas y salidas de los viajeros procedentes de países no pertenecientes a la UE que ingresan en el espacio Schengen.

En lugar de los sellos tradicionales en el pasaporte, este nuevo Sistema Europeo de Entrada y Salida​ recopilará de forma segura datos personales como la fotografía del viajero, las huellas dactilares y los datos del pasaporte en los puntos de control fronterizo. Se espera que mejore el seguimiento de las estancias de corta duración de hasta 90 días dentro de un período de 180 días.

También es importante señalar que el EES no es un visado ni un permiso de viaje, a diferencia de la autorización ETIAS. Así que, si te preguntas “¿Qué es un sistema biométrico de control de entrada y salida?”, podemos decir que es un sistema diseñado para hacer los controles fronterizos más rápidos y fiables. En otras palabras, el objetivo principal de este sistema biométrico de entrada y salida es aumentar la seguridad, prevenir estancias prolongadas y mejorar la gestión migratoria en toda Europa.

¿Cuándo comienza el Sistema de Entrada y Salida y qué deben hacer los viajeros?

Después de varios aplazamientos, la fecha de inicio del Sistema de Entrada y Salida de la UE se ha confirmado oficialmente para el 12 de octubre de 2025. Se implementará de forma gradual este otoño y estará completamente operativo para el 9 de abril de 2026. Durante este período de transición de seis meses, algunas fronteras pueden seguir sellando pasaportes manualmente.

Una vez que el sistema esté completamente operativo, los nacionales de países como el Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Australia y muchos otros deberán registrar su entrada y salida cada vez que crucen una frontera exterior del espacio Schengen.

Así, tras la implementación del Sistema de Entrada y Salida de la UE, los turistas británicos deberán proporcionar sus datos biométricos (cuatro huellas dactilares y una imagen facial) en quioscos automatizados o directamente en los puntos de control fronterizo. Los niños menores de 12 años estarán exentos de proporcionar huellas dactilares, pero los viajeros deberán responder en la pantalla de la máquina a algunas preguntas breves sobre su viaje.

El registro se llevará a cabo en todos los puntos de entrada, incluidos aeropuertos, fronteras terrestres y puertos marítimos. Los viajeros que crucen en coche serán dirigidos a un quiosco que muestre su número de registro, donde podrán proporcionar su información biométrica bajo la supervisión del personal fronterizo.

Para disfrutar de una experiencia fluida con el Sistema Europeo de Entrada y Salida (EES), los viajeros deben asegurarse de que sus pasaportes sean legibles por máquina y válidos durante toda su estancia. También se recomienda disponer de tiempo adicional para los controles fronterizos durante la fase inicial de implementación, ya que el registro puede tardar más de lo habitual.

¿Cuáles son los beneficios del Sistema de Entrada y Salida de la Unión Europea?

Este sistema biométrico de control de entrada y salida ofrece múltiples beneficios, entre ellos:

• Reforzar la seguridad nacional al prevenir entradas ilegales y estancias prolongadas,
• Automatizar y agilizar los procesos de control fronterizo mediante la verificación biométrica,
• Proporcionar datos precisos y en tiempo real sobre los movimientos de los viajeros en Europa,
• Reducir el fraude de identidad y fortalecer los controles migratorios,
• Apoyar una gestión fronteriza armonizada y eficiente en los 29 países del espacio Schengen.

En general, se espera que la transición de los sellos de pasaporte tradicionales al registro biométrico mejore significativamente la supervisión, refuerce el control migratorio y agilice los procedimientos fronterizos en todo el espacio Schengen.

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